Tópicos cubiertos
Normativa en cuestión
Desde el punto de vista normativo, el GDPR sigue siendo un pilar fundamental para la protección de datos personales en la Unión Europea. Con el avance de la tecnología y la aparición de nuevas prácticas empresariales, el Garante ha establecido que es esencial estar al tanto de las normativas vigentes y de las mejores prácticas para garantizar la compliance.
Interpretación e implicaciones prácticas
La compliance con el GDPR no se limita a cumplir con la normativa; también impacta directamente en la confianza de los consumidores y en la reputación de las empresas. Las organizaciones deben implementar medidas adecuadas para asegurar que los datos sean tratados de manera segura y transparente.
¿Qué deben hacer las empresas?
Las empresas deben realizar un análisis exhaustivo de sus procesos de tratamiento de datos y adoptar medidas como la designación de un Data Protection Officer (DPO), llevar a cabo auditorías regulares y capacitar al personal sobre la protección de datos.
Riesgos y sanciones posibles
El riesgo de compliance es real: las empresas que no cumplan con el GDPR pueden enfrentar sanciones significativas, que pueden alcanzar hasta el 4% de la facturación anual global o 20 millones de euros, según cuál de estos valores sea mayor.
Mejores prácticas para la compliance
Entre las mejores prácticas para la compliance con el GDPR, es fundamental mantener una documentación detallada de las actividades de tratamiento de datos, implementar medidas de seguridad adecuadas y asegurar una comunicación clara con los interesados sobre sus derechos.





